Amor Inocente

CUANDO TE CONOCI…

2003 Seúl – Corea

-Señorito Minho ya almorzó? – preguntaba una agradable mujer a un niño de ojos hermosos, grandes y profundamente chocolates

-nee, ajumma, no entiendo quien vendrá? – preguntaba curioso el pequeño de 12 años

-al parecer su padre, invito a pasar el verano a su socio en casa – indicaba la mujer dirigiéndose a la cocina mientras Minho soltaba un suspiro y regresaba al tercer piso donde se encontraba su habitación.

Choi Minho era el único heredero de Choi Hyung Seo que era un importante empresario a nivel de asía, manejando las empresas Choi a través de todo Asia, lamentablemente la suerte en el amor a este hombre no le había sonreído del todo, luego de conocer al amor de su vida, casarse, y tener un hermoso hijo, la mujer había caído enferma, sin importar cuánto dinero se gastaba el Sr. Choi no la pudo librar de la muerte, sumiéndolo en una depresión, cuando Minho aún era un bebe, que prácticamente era cuidado por los empleados en su casa.

Así creció Minho, falto de una madre, y aunque su padre pusiera el mundo a sus pies, lo único que pedía el pequeño Minho era la presencia de este a su lado, pero la mirada grande y profunda del niño le recordaba mucho a su esposa al padre de Minho, por lo que siempre se mantenía alejado.

 

En ese momento el padre de Minho ingresaba al salón alertando a Minho que se seguramente se encontraba desocupado, corriendo a recibirlo alegremente como siempre lo hacía.

-appa! – gritaba el niño mientras el hombre lo recibía para abrazarlo

-anniong, campeón, te portaste bien? – preguntaba el hombre mientras Minho asentía

-appa! Gane, bueno ganamos el campeonato de futbol infantil en la escuela, no estás orgulloso de tu hijo? – preguntaba Minho mientras el hombre sonreía ampliamente ante las palabras de su hijo

Si bien Minho tenía la mirada de su madre, el carácter, y toda su personalidad, era como la de su padre, competitivo, ganador, exitoso y carismático, incluso a pesar de ser un niño.

-claro que lo estoy!, siempre lo estoy, dime lo que deseas y lo traeré para ti – ofrecía el padre

-salgamos de viaje appa! – pedía Minho ilusionado mientras su padre suspiraba triste y daba una caricia en el cabello ya largo de su pequeño

-lo lamento campeón, no se puede, invite a un amigo a casa, tenemos que atender muchos negocios – indicaba el padre de Minho mientras, haciendo que el chiquillo borre su sonrisa

-appa! Me lo pasare encerrado? – preguntaba ya no tan feliz Minho

-anio! Mi colega tiene un hijo de tu misma edad, bueno creo que es tu hyung porque es mayor por algunos meses, podrás hacer un amigo nuevo – indicaba su padre mientras Minho hacia un puchero de molestia en su rostro

-no quiero nuevos amigos!, solo quiero tiempo con mi padre! ES MUCHO PEDIR! – gritaba molesto Minho

-Minho! Ya hemos hablado esto, por favor no me hagas esto, no hoy, por favor! – pedía su padre con una amable sonrisa idéntica a la de Minho

-Minho, el hijo de mi colega, puede ser un gran amigo, el también perdió a su madre de pequeño, y su padre como yo es un hombre bastante ocupado, las reuniones que tendremos serán importantes probablemente fusionaremos algunas empresas, nos volveremos casi una familia, debido a la fusión seremos la compañía más rentable en Asia, por eso te lo pido, Minho puedes tener un poco de paciencia con tu padre? – pedía el hombre mientras Minho solo lo miraba tristemente y aguantaba las lagrimas, Minho hizo una venia y se dirigió a su habitación.

-un gran amigo?.... yo solo quiero tiempo con appa… - susurraba echado en su cama Minho

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2003 Aeropuerto de Seúl – Corea

 

Un rubio niño caminaba junto a su padre, aquel niño con apariencia de un ángel sonreía esplendido al estar con su padre, el todo el tiempo lo pasaba en Daegu siendo criado por su abuela, muy pocas veces tenía la oportunidad de estar con su padre. Y para el estas vacaciones serian lo mas fantástico, desde el accidente automovilístico que tuvieron, donde solo sobrevivieron él y su padre, el había pasado a hacer prácticamente el hijo de la abuela, una pequeña cicatriz debajo de su ojo le recordaba el accidente siempre, pero mantenía su sonrisa en su rostro, su padre decía, que Kibum era la copia exacta de su madre, y que cuando sonreía el era muy feliz, así que siempre tenía una en su rostro. Y esta vez su padre había viajado desde Japón a recogerlo a Daegu y traerlo a Seúl, acaso no podía ser mas feliz?

-Kibum debes prometerme que te portaras bien ne? – decía el padre de Kibum

-ne, no te preocupes appa, estas serán las mejores vacaciones! – decía alegre Kibum sin quitar su sonrisa

-no puedo esperar a llegar al hotel, appa! Tengo tantas cosas que quiero conocer de Seúl! Nos divertiremos mucho! – alegaba el rubio subiendo a ese elegante coche que los había recogido

-verdad, Kibum, bueno no iremos a un hotel, veraz, el viaje a Seúl es porque tengo unas importantes reuniones de  negocios con el dueño de las empresas Choi, tendremos una fusión probablemente, y el nos invito a pasar el verano en su casa debido a las reuniones largas y tediosas podrían ser mas cómodas en un ambiente familiar – explicaba el padre de Kibum mientras este salía de su burbuja inmediatamente

-pero yo pensé… que… - Kibum no podía hablar debido a la impresión que acaba de recibir “su padre no estaría con él”

-lo siento mi niño, luego de esto, pasare tiempo contigo lo prometo, ahora necesito que te portes bien – pedía el hombre

-pero appa! Yo! – Kibum trataba de replicar algo a su padre “que sentido tenia traerlo desde tan lejos si lo iba a dejar botado”

-Choi Hyung Seo tiene un hijo de tu edad, serán buenos amigos, son muy parecidos por lo que me conto su padre, es un niño extraordinario, así que no pienses que estarás solo – indicaba el padre de Kibum

-appa! Pero yo quiero conocer Seúl, no jugar con un niño! – decía molesto Kibum afilando esa llamativa mirada que tenia

-Kibum! Podrás salir de tour si lo deseas, pero no quiero nada de berrinches y desplantes, si no te regresare a Daegu y te quitare tus tarjetas de crédito! – retaba el padre

 

A diferencia de Minho, Key era un niño, que al ser criado por su abuela, nunca le era negado nada, porque era el niño hermoso de su abuela, y su padre para compensar su falta de presencia le había otorgado a Kibum una libertad económica a su hijo desde pequeño, así que el pequeño y adorable Ángel Kibum era una mini Diva que obtenía lo que quería cuando lo quería, aunque la mayoría de escándalos que armaba a sus cortos casi 13 años eran solo por llamar la atención de su padre, por supuesto sin éxito alguno, Kibum era una especie de príncipe en Daegu, todos giraban alrededor de él y ahora que se encontraba molesto con su padre por la decepción inminente que había recibido se encargaría de cobrarse el desplante.

 

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Llegaron a la gran mansión en donde Minho, su padre y algunos empleados vivían, Kibum al verla solo soltó un suspiro “no estaba tan mal”, y por otra parte ya se encargaría de poner a todos a sus pies, caminaron hasta la entrada y fueron recibidos por un atento mayordomo que les indico el camino al salón principal.

-Kim Young Seok, que gusto verte – saludaba el padre de Minho dándole una mano al padre de Kibum

-igualmente Hyung Seo, ah pasado mucho tiempo, 15 años? – preguntaba sonriente el padre de Kibum devolviendo el saludo al padre de Minho

-jajajaja diciéndolo así me siento viejo, pero, toma asiento, wouu, realmente tu hijo es precioso! – alagaba el padre de Minho a su amigo

-gracias, gracias, el es mi adorado hijo, cariño saluda! – pedía el padre de Kibum

Buenos días, mi nombre es Kim Ki Bum, espero llevarnos bien, por favor cuide de mi!  - se presentaba  Kibum haciendo una venia

-pero que educado, hola Kibum, es un gran gusto conocerte tu padre siempre me cuenta lo orgulloso que esta de ti – respondía el padre de Minho

-esperen un momento llamare a mi hijo, por favor, Sun Hye llama a Minho – pedía el padre de Minho

-eres una eminencia, hablas japonés, ingles a tu edad, y eres presidente de varios clubs en tu escuela, con razón tu padre esta tan orgulloso – seguía alagando el padre de Minho mientras Key sonreía más ampliamente, le encantaba ser alagado y destacado

Lo malo de esa situación aparentemente era ninguna, pero Minho había presenciado como su padre se desvivía en halagos aquella niña?, una niña presidente? No podía ser coherente, igual la molestia y los celos formo una muy agradable idea en su cabeza e instantáneamente odio, a esa rubia.

-padre! – se anunciaba Minho entrando al salón haciendo acto de presencia y sorprendiendo a Kibum al ver su profundo y hermosa mirada de aquel muchacho, de repente sentía sus mejillas calientes, sus manos sudadas, y cohibido por la presencia de aquel niño.

-Minho ven aquí! El es mi hijo, Choi Min Ho – presentaba el padre de Minho a Kibum y su padre

-Si que es apuesto, pero que ojos tan grandes – decía impresionado el padre de Kibum examinando al muchacho que parecía esculpido a mano

-pensé que tu hijo era menor que el mío!, - comentaba el padre de Kibum

-lo es, tiene 12 años, cumplirá 13 en diciembre – respondía orgulloso el padre de Minho

-que le das de comer, que esta tan alto? – preguntaba aún más sorprendido el padre de Kibum mientras Kibum desviaba su vista aquel chico lo miraba tan insistentemente que pensaba que podría hacerle un hueco con sus ojos grandes

-bueno, el es mi campeón – hablaba lleno de orgullo el padre de Min Ho

-entonces es tan bueno en deportes como tu? Seguro será un matador con las chicas en unos años mas jajaja – comentaba alegre el padre de Kibum mientras reía contento con su amigo de la infancia.

Si por que los padre de Minho y Key habían sido amigos de la infancia, hasta que terminaron sus carreras universitarias no se habían vuelto a ver, y al tomar contacto de nuevo no dudaron en hacer negocios juntos.

-Hola niña como te llamas? – preguntaba Minho mirando a Kibum haciéndolo ponerse como un tomate mientras que los padres de ambos niños miraban algo preocupados la escena

-niña?, estás loco! Soy un niño, un niño! – gritaba Kibum sorprendiendo a Minho

-será mejor que te disculpes inmediatamente – pedía el padre de Minho

-no lo sabía, aparte parece una niña! – respondía Minho sin querer disculparse

-anio! Sr. Choi no hace falta que lo obligue, no se preocupe! – intervenía Kibum poniendo una encantadora sonrisa y sorprendiendo al par de Choi

-gracias Kibum! – respondía el padre sorprendido ante los excelentes modales del rubio

-deberías aprender de tu hyung Kibum, Minho, eso es tener clase! – decía por ultimo su padre mientras indicaba el lugar a su oficina al padre de Kibum y se retiraban comentando sus anécdotas pasadas

-deberías aprender de mi! bingu! – repetía Kibum con una vocecilla molesto que hizo aterrizar a Minho sobre la presencia de los mayores

-tú! Quien te crees? – preguntaba Minho molesto

-que quien me creo? Que te crees tú es lo correcto? Niña? Agradece, que no te di una patada en tus inexistentes bolas  idiota – respondía Kibum volteándose y preguntando a un mayordomo por su habitación

 

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CONVIENDO JUNTOS

 

Una semana, una semana había pasado de tortuosas miradas entre ambos a la hora de comer, de azotazos en las puertas de la mansión de Minho, aún peor, lo que más odiaba el pequeño Choi era ser arrastrado en las interminables compras de la rubia, porque para Minho Kibum era una niña, se vestía rosa como niña, usaba maquillaje de niña, hablaba como niña y compraba como niña, lo que más le molestaba a Minho era que teniendo a todos los empleados a disposición de la pequeña diva, Kibum se encaprichaba en que Minho lo acompañe, y aunque el tenia sus excusas una fulminante mirada de su padre y no podía replicar nada, “que asco ser un niño” era lo que pensaba Minho constantemente.

-apura bobo! Aun no vi esa tienda! – ordenaba Kibum mientras Minho lo seguía molesto y el sequito de empleados cargaban sus bolsas

-no entiendo, porque tengo que venir? – preguntaba molesto Minho

-por que yo lo quiero así – respondía Kibum parando a ver un estante donde se exhibían diferentes joyas

-son hermosas! – susurraba Kibum entrando a la tienda haciendo que Minho suelte un largo suspiro

-me puede mostrar esa pulsera que tiene llaves – pedía Kibum al empleado que atendía la tienda

-niño deja de jugar y regresa con tu mama! – respondía cansado el vendedor

-lo comprare, muéstremelo! – decía Kibum en un tono autoritario

-deja de jugar niño, vete o llamare a seguridad para que te saquen!  - indicaba el el vendedor mientras Kibum se preparaba para hacerle un escándalo lo que no espero que el aburrido vendedor literalmente lo arrastra hacia afuera

-idiota!, me lastimaste – se quejaba Kibum fuera de la tienda mientras Minho en días soltaba una carcajada

-que te ríes imbécil! – hablaba molesto Kibum

-ya no quiero nada! Vámonos! – dijo Key haciéndole una seña a uno de los empleados de Minho

En el auto Minho observo como Kibum miraba algo abstraído un collar con una llave, al parecer el desplante en el centro comercial lo había afectado terriblemente y ahora se había puesto a llorar viendo un tonto collar, lejos de la molestia que Minho podía sentir hacia Kibum, odiaba ver a las personas llorar así que se decidió a hablarle.

-oye deja de llorar, enserio pareces más una niña si lo haces – decía Minho

-cállate, déjame en paz! – respondía Kibum

-solo te lo digo por tu bien y por el mío no quiero ser regañado por que piensen que te hice llorar cuando no tengo nada que ver! – alegaba Minho mientras Kibum secaba sus lagrimas con sus mangas y lo miraba intimidante

-no diré nada, estas feliz, ahora déjame en paz! – decía Kibum volviendo su vista a ese collar de llave que era de su madre.

-después no te quejes – susurraba Minho viendo algo “casi nada” preocupado a Kibum

 

Al llegar a la mansión nuevamente el azote de las puertas alertaba a los padres de ambos niños que habían regresado de su paseo, daban un suspiro de incredulidad y continuaban haciendo sus cuentas.

Ese día Minho escucho sollozar toda la noche a Kibum, por que habían puesto a la Diva en su piso, si el tercer piso era de Minho, estaba su habitación, su habitación de juegos, su habitación de deportes, y el resto de habitaciones no las usaba pero eran de él a su egoísta entendimiento, habían un montón en el segundo piso, por que no pudieron darle una ahí a Kibum?, sin embargo escucharlo llorar había matado todo su buen humor de ver algunos videos que no eran tan aptos para niños de su edad, así que frustrado se acostó pensando en el rostro bonito de Kibum llorando.

 

Al día siguiente los padres de ambos muchachos, indicaron en el desayuno que ese día se desarrollaría una fiesta debido al anuncio de algunas empresas por parte de ambas compañías, y que en la noche ellos debían vestir de gala y guardar sus modales por que vendría gente importante. Kibum sonrió y asintió feliz, le encantaban esas fiestas la gente se la pasaba halagándolo y envidiándolo, por su parte para Minho eran molestas, ya que debía usar esos trajes incómodos y sobre todo escuchar charlas que no le importaban en lo más absoluto.

Fue una suerte que luego del desayuno su mejor amigo y hyung llamara a Minho, esa mañana lo visitaría para ponerlo al día sobre el resto de sus amigos.

-hyung! Enserio, estoy viviendo el infierno! – se quejaba Minho mientras jugaban videojuegos en la habitación especial de Minho

-no creo que sea tan malo, es lindo, cuando lo ví, no estaba nada mal – respondía su amigo

-ya Jonghyung hyung estás loco!, es una molestia total – se quejaba Minho

-te parece si vamos a comer, tengo hambre - decía Jong mientras Minho asentía

 

Cuando entraron al comedor se encontraba Kibum degustando su postre por excelencia, crema batida con fresas, entraron y le indicaron a la sirvienta que deseaban comer algo, inmediatamente una serie de platillos eran ofrecidos y puestos en la mesa para el degusto de Minho y su amigo.

-anniong, soy Jong hyung, pero puedes llamarme Jong, un gusto, cómo te llamas – preguntaba Jong a Kibum

-Kim Ki Bum – respondía seco Kibum y una idea llego a la cabeza de este, fastidiaría a Minho usando a Jong

-bueno gracias por la comida! Adiós! – se despedía Kibum saliendo de su sitio y empezando a caminar de una forma un tanto extraña para Minho pero excitante para Jong

-ah cuando te vayas! Pasa a despedirte! – decía Kibum dándose una vuelta, sonriendo espléndidamente a Jong que en ese momento dejaba cae el jugo de su vaso ante la imagen que le daba Kibum

-hyung! Que tienes! – gritaba Minho molesto no por Kibum si no por Jong sentía, algo raro su interior, le molestaba que otra persona mirara tan descaradamente a Kibum, ósea no es que no lo haya hecho por qué no lo había hecho, pero le molestaba, Kibum había venido a ser su amigo no el de Jong, se convencía Minho

-subamos! No tengo ya hambre – decía Minho dejando la mesa siendo seguido por Jong

 

Ya en el tercer piso de la mansión cuando Minho se disponía a volver a encender esa consola de juegos su amigo lo interrumpió.

-oye Minho, quieres verlo? – le preguntaba Jong mientras se acercaba a su mochila

-hyung? Sigues consiguiendo esas revistas? – preguntaba Minho

-nee, no te hagas el santo que gracias a tu soborno con el vendedor ya no nos dice nada! – respondía Jong

-mmm…. Y si vemos un video? – proponía Minho

-hey! Nos pueden escuchar y estaremos en problemas, la revista está bien! – indicaba Jong mientras Minho hacia un gracioso puchero

-desde que la Diva llego no eh podido ni siquiera ver un minuto de nada! – se quejaba Minho mientras Jong aguantaba la risa

 

En eso un empleado entro a indicarle a Minho que debía empezar a alistarse para la fiesta ya que los invitados llegarían en una hora, el tiempo había pasado realmente rápido.

-mmm.. Creo que yo también debería irme omma se preocupara!, adiós Minho, despídeme de tu novia! – decía Jong antes de salir de la habitación dejando a un sonrojado Minho dentro

Novia?, novia? Acaso su hyung había perdido la cabeza como Kibum podría ser su novia?, es decir el que actuara como chica el 120% del tiempo no implicaba que sea una no?, aparte el no quería tener una novia, aún era joven?, y ver esas parejas en su colegio le daba repugnancia… y bueno Kibum no le daba repugnancia, pero era molesto, aparte, para eso existían esos videos que lo hacían desfogar todos sus extraños síntomas de la pubertad, definitivamente Choi Minho no tendría una novia nunca, y esa novia no podía ser el rubio Diva, no?

 

Cuando Jong salía por la puerta del cuarto de juegos Kibum se había acercado para fastidiar a Minho pero no conto con escuchar las declaraciones del chico cara de perro, novia?, novia? Sus pelotas, el era un chico un chico!!, pero porque ese pensamiento en realidad no le desagradaba del todo?, no es como si Choi fuese un gran novio? En el caso que llegara a serlo no?, aparte era absurdo su cuerpo reaccionaba tan raro desde que conoció al ojón idiota, definitivamente Kibum no quería ser la novia, mejor dicho el novio de nadie! No?

-adiós Kibum, no hagas renegar tanto a Minho! – decía Jong saliendo rápido y corriendo por las escaleras, acelerando la bajada al subirse al barandal y lanzarse por este hasta llegar al final.

-perro idiota, yo hago renegar a quien quiero! – susurraba Kibum regresando a cambiarse a su cuarto

 

La fiesta estaba en su apogeo, los invitados halagaban como siempre a Kibum mientras un aburrido Minho escuchaba conversaciones que no entendía, se excuso y decidió jugarle una broma a Kibum, en el tiempo que llevaban viviendo juntos se había dado cuenta que Kibum odiaba la oscuridad y una pequeña broma no caía mal a nadie no?

-oye! Kibum, oye! – llamaba Minho a Kibum mientras este dejaba de ver a los invitados para ver a Minho y su deslumbrante presencia

-que quieres, estoy ocupado! – susurraba entre dientes Kibum sin dejar de sonreír

-quieres ver algo genial? – preguntaba Minho a Kibum mientras volvía a sonreír para los invitados

-que tan genial? – preguntaba curioso Key, odiaba ser como un gatito curioso.

-en el  jardín de la casa, también hay decoraciones, parece como estrellas, quieres verlo? – preguntaba Minho mientras que ah Kibum se le abrían los ojos de impresión

-en serio?, si quiero, llévame – ordenaba Kibum mientras, Minho lo miraba sonriente

-di por favor! – indicaba Minho sin dejar de sonreír

-llévame! – respondía Kibum

-di por favor! – replicaba Minho

-llévame! – repetía Kibum

-si no dice… - Minho empezaba a chantajearlo y Kibum lo interrumpió

-por favor llévame rápido! Feliz! – decía con un puchero Kibum haciendo sonreír a Minho ante la ternura que le causo verlo así

-sígueme! – decía Minho tomando la mano de Kibum que en ese momento le quemaba como fuego, una sensación parecida había tenido Kibum cuando Minho tomo su mano, “por qué?” se preguntaban mientras caminaban al gran jardín.

 

Como Minho lo había dicho el jardín estaba repleto de bellas luces blancas que decoraban las elegantes estatuas de arbustos y la pileta tenía como un arcoíris de luces al lanzar el agua, Kibum estaba tan embelesado viendo aquello que no se dio cuenta cuando Minho había soltado su mano y se había ido.

-wouu, es increíble… gracias – decía sonriente Kibum mientras volteaba a ver Minho

- Minho? – preguntaba Kibum y en ese momento todas las luces se habían apagado, Kibum estaba completamente solo en la oscuridad, y el miedo, y los horribles recuerdos del accidente que había sufrido más niños regresaron a él, había una razón por la cual a Kibum no le gustaba la oscuridad, su madre había muerte la noche que tuvieron ese accidente, y sus gritos desesperados no fueron oídos hasta que amaneció.

 

Minho miro a lo lejos como Kibum parecía decirle gracias y sonreírle tan cálidamente, su corazón empezó a palpitar más fuerte en su pecho y cuando lo vio llamarlo salió del trance para así poder bajar la palanca de energía.

 

Cuando escucho los gritos desesperados de Kibum decidió que era suficiente y volvió a subir la palanca, haciendo que la luces regresen, lo que vio lejos de asustarlo le hizo doler el corazón, Kibum estaba llorando en el suelo en posición como la de un bebe mientras parecía taparse los odios, se acerco preocupado y lo que paso a continuación lo dejo helado.

-Kibum, Kibum, fue una broma, que tienes? – decía tratando de reir Minho, sintió la mirada afilada de Kibum y luego un golpe, fuerte golpe en su estomago, Kibum lo había golpeado.

-te odio!, te odio! – dijo Kibum y corrió a refugiarse a la fiesta

Pero qué diablos había pasado?, Minho no entendía lo que su travesura había provocado y ahora miraba triste como Kibum se iba molesto y llorando a la fiesta.

 

Al entrar de nuevo al gran salón, Kibum seco rápidamente sus lagrimas y puso una sonrisa falsa en su rostro, se había asustado tanto, no quería ser tan malo con Minho, pero enserio se había sentido perdido en ese momento, aún enojado regreso al salón y se dispuso a buscar a su padre, no quería pasar un día más con Minho, sabiendo lo idiota que podía llegar a ser.

Cuando intento hablar con su padre, un lo siento Kibum estoy ocupado ahora, lo alejo y lo frustro mucho más, cuando se disponía a regresar, Minho lo había alcanzado.

-Kibum, lo siento, no sabía que tenias tanto miedo a la oscuridad, lo siento, no te quejes – pedía Minho mientras  Kibum lo exterminaba con la mirada

-no pensaba quejarme solo aléjate de mi! – pedía el rubio tratando de alejarse de la mirada arrepentida de Minho

-lo siento – escucho susurrar una vez más a Minho, pero se convenció que no era porque realmente lo sintiera, era porque tenía miedo de que su padre lo castigue así que molesto  se refugió nuevamente con los invitados mientras Minho lo seguía y guardaba una distancia prudente de Kibum.

 

Kibum estaba molesto, a pesar que le había pedido a Minho de que se fuera, al parecer el muy tonto no lo había entendido y se mantenía cerca lanzándole miradas de perrito arrepentido, cuando se disponía a regañarlo, un brazo lo detuvo, un hombre de aproximadamente 30 años lo miraba sonriente.

-disculpe, necesito ir allá! – decía amable Kibum mientras hacia una venia

-alguien te ah dicho que eres el más hermoso de esta fiesta? – halagaba el hombre mientras Kibum sonreía complacido ante las palabras y diviso algo que lo motivo a seguir esa conversación Minho estaba apretando sus puños al parecer molesto.

-gracias, no lo han dicho así, pero si, supongo que soy hermoso! –respondía Kibum sonriendo nuevamente

-ten! – le ofrecía el hombre una copa

-disculpe, no bebo aún tengo 12 años – explicaba Kibum

-12 años y tan hermoso! Pero no te preocupes es solo champagne con duraznos, en realidad es delicioso y no tiene alcohol – le engañaba el hombre a Kibum que no sabía exactamente a lo que se refería el hombre solo sonrió y recibió la copa.

-es delicioso – insitaba el hombre mientras que Kibum ponía la copa en sus labios en forma de corazón

-que hacess? No puedes beber – interrumpió Minho

-muchacho no ves que fastidias! – dijo el hombre apartando a Minho

-Señor, somos niños no podemos beber! – decía Minho desafiando al hombre

-Kibumie verdad que no queremos escuchar a este tonto?, bebe anda es delicioso – decía el hombre deteniendo a Minho

-Kibum no! – exclamaba Minho mientras que un molesto Kibum se había bebido todo el contenido de un trago

-mmm… si esta rico – dijo Kibum sonriendo al hombre

-vez no te metas niño – le dijo el hombre a Minho dándole un empujón y apartándolo

Kibum y el hombre habían caminado hasta una zona un poco mas privada mientras Minho sentía las carcajadas de Key, apagarse poco a poco, cuando se acerco sigiloso a la zona observo que forcejeaba torpemente, con el hombre que intentaba taparle la boca, y de inmediato sintió la adrenalina llenar su cuerpo.

-Déjeme! Que tiene! – intentaba gritar Kibum mientras el hombre intentaba toquetearlo y taparle la boca

-calle niño, lo vas a disfrutar - le había dicho el hombre

-déjenme, sabe quién soy? – intentaba soltarse Kibum mientras el hombre lo arrastraba hasta el segundo piso

-no me importa quien eres, te hare mío igual – le susurraba aquel hombre al oído mientras lo arrastraba con una facilidad impresionante había abierto una de las habitaciones y lo había lanzado a la cama que estaba en ella mientras el hombre se sacaba la camisa y lo miraba lujurioso.

-un solo grito y te mato! – le amenazo y Kibum empezó a temblar

-DEJALO PERVERTIDO!!! – Kibum sintió el grito de Minho que había entrado a la habitación

-no te preocupes tu también tendrás tu dosis, bobo! – anuncio el hombre empujando fuertemente a Minho que choco con una de las paredes de la habitación dejándolo adolorido

-no te atrevas a tocarlo, mi padre, mi padre te buscara y hare que te mate, yo soy Choi Minho hijo de Choi Hyung Seo – grito Minho haciendo que el hombre pierda la concentración de lo que intentaba hacer al tratar de quitarle la chaqueta a Kibum

-así? Entonces te secuestrare y recibiré mucho dinero – dijo el hombre volteando a ver a Minho

-corre! – grito Minho pero fue bruscamente detenido por el hombre que en ese momento también había atrapado a Kibum con otro brazo

-ahora se callan y hacen lo que les digo o… - el hombre dejo de hablar Minho había empezado a dar golpes en su estomago y en donde podía, pero la fuerza superior del hombre lo había lanzado hacia atrás mientras tomaba a Kibum del cuello estrangulándolo

-lo matare, lo matare! – decía siniestro el hombre en un arrebato de furia Minho observo el antiguo y caro jarrón de la habitación y sin dudarlo, lo estampo en la cabeza del hombre haciéndolo perder la conciencia por un momento

-vamos – exclamo asustado Minho tomando la mano de Kibum que miraba todo aterrado

Corrieron por los pasillos de la mansión, a Minho no se le ocurrió mejor idea que ir a su habitación de repente sintieron que el hombre, los seguía velozmente y antes de que pudiera alcanzarlos Minho había cerrado la puerta de su habitación le había puesto seguro pero los embistes del hombre pareciera que la iban a romper, aún asustado al igual que Kibum le pidió que lo ayudara a mover el escritorio y todo lo que pudieran a la puerta.

 

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A VECES LAS DESGRACIAS TRAEN BUENOS MOMENTOS

 

Sentían las embestidas del hombre en la puerta Kibum asustado empezó a temblar, Minho se encontraba en la misma situación en su vida había vivido algo así y aunque el pareciera mayor de lo que aparentaba se daba cuenta que aún solo era un niño, y odio no poder remediarlo, odio ver temblar a Key de esa manera, así que hizo algo que jamás se hubiera planteado.

 

Abrazo a Kibum con todo lo que su fuerza daba sintió que el llanto de Kibum había cesado y que él también se aferraba a su cuerpo con fuerza, pasaron minutos, horas abrazados, no lo sabían solamente sintieron que habían dejado de embestir la puerta, pero aun asustados mantenían el agarre y no se atrevían a salir.

-lo siento – susurro Minho

-yo lo siento, te hizo daño? – preguntaba Kibum sin querer soltarse del abrazo de Minho

-anio, bueno no mucho! A ti? – pregunto Minho

-no me hizo nada, solo me toco un poco pero no llego hacerme nada, gracias Minho, si no hubieras llegado yo… - y a Kibum se le quebró la voz

-lo siento, lo siento por no llegar antes – decía Minho meciendo a Kibum sin soltarlo de alguna forma se sentía tranquilo abrazando al rubio

-gracias Minho, yo realmente estaba aterrado – susurraba Kibum respirando en el cuello de Minho provocándole cosquillas a Minho

-pensé que tenias más miedo de la oscuridad – dijo Minho intentando cambiar el ambiente deprimente mientras Kibum sonreía aún abrazado

-bobo! – le susurro

-Minho podría no soltarme? – pregunto en susurros Key

-no lo hare – respondió en susurros Minho

 

Paso mucho tiempo así incluso parecía ser ya de madrugada se notaba el claro cielo aunque aún no había salido el sol Minho y Kibum estaban aún abrazados sobre la cama.

-cuando te toco.. te gusto? – pregunto de repente Minho sacando de su trance de memorizar el rostro de Minho a Key

-claro que no!... ni siquiera eh dado mi primer beso, tonto!, no me gusto nada! – respondía Kibum mirando con un puchero a Minho

-me gusta cuando haces eso – comento el alto haciendo que Kibum lo observe extrañado

-a mí me gustan tus ojos, me dan envidia – confeso Kibum mirando a otro lado mientras Minho sonreía ante la tonta confesión del rubio

-yo creo que los tuyos también son hermosos, son diferentes pero hermosos -decía Minho delineando con su mano el rostro de Kibum que solo cerró los ojos y se dejaba llevar por las suaves caricias de Minho

-como te hiciste esto? – pregunto Minho tocando la cicatriz casi impermisible de Kibum

-fue del accidente – contesto Kibum enfocando su vista en Minho

-accidente? – pregunto Minho

-ne, no te diste cuenta que no tengo mamá? – explicaba Kibum

-yo tampoco la tengo – agregaba Minho mirando a Kibum

-la mía murió hace 5 años, íbamos de regreso en el auto, era de noche, al parecer los frenos del carro fallaron, no lo sé, solo recuerdo dar vueltas dentro del auto, mi padre estaba tirado e inconsciente fuera del carro  y mi madre se quejaba lloraba yo había quedado en una especie de triangulo y no me hice mucho daño me acerque a mi omma y me dijo que me alejara que el carro podía explotar, yo no quería dejarla Minho, pero me obligo intente despertar a mi padre, pero fui inútil tenía mucha sangre en el piso y yo gritaba por ayuda, todo estaba oscuro no sabía qué hacer, seguí gritando cuando me di cuenta el sol había salido y una ambulancia había llegado, al parecer mi padre pudo llamar antes de caer inconsciente a emergencias, luego de eso, no recuerdo más – contaba Kibum abrazando fuerte a Minho que lloraba junto con él.

-ella murió esa noche, luego del velorio y de que mi padre se recuperara me envió con mi abuela el estaba muy deprimido y no podía cuidarme correctamente – terminaba de contar Kibum mientras Minho daba caricias en su espalda

-lo siento, lo del jardín lo siento mucho! – dijo Minho rompiendo en llanto

-no te preocupes! Al menos de estas vacaciones puedo molestarte! La abuela no me deja salir mucho, creo que entiendo porque – respondía Kibum consolando ahora él a Minho

-Minho, tu omma como se fue? – pregunto tímido Kibum

-no lo sé, mi appa, nunca quiere hablar de eso, lo que me dijeron los empleados fue que ella enfermo gravemente y murió – respondía Minho

-no la recuerdas? – preguntaba Kibum

-no, ella murió cuando yo aún era un bebe – contestaba Minho aspirando el agradable olor del cabello de Kibum

-lo siento! – susurro Kibum

-no te preocupes, yo tengo algunas fotos y recuerdos escondidos, appa, no me deja ver eso, pero igual yo procure hacerme de algo de ella, ese jarrón era de la habitación de mi madre, nadie entra ahí por orden estricta de mi padre – explicaba Minho dando a entender a Kibum sobre lo sucedido

-perdón, era de tu madre, no sé qué decir! Lo siento! – decía Kibum llorando

-no llores, Kibum tengo otras cosas, tú tienes algo de tu madre? – preguntaba Minho mientras Key tomaba con su mano libre el collar que siempre llevaba de ella

-esto era de ella, es una llave, mi abuela dice que omma siempre la llevaba de niña porque creía que le daba buena suerte – confesaba Kibum

-por eso te pusiste triste en esa tienda, porque no te dejaron ver ese brazalete de llaves no? – preguntaba curioso Minho

-mmm… yo de verdad quería comprarlo – susurraba Kibum

-Key – susurro Minho

-que dijiste?  - pregunto Kibum

-cuando te vi viendo tu collar pensé en ti como una llave, haces que todos hagan lo que quieres con tanta facilidad como si abrieras puertas – confeso Minho

-Key – susurro Kibum

-te diré Key, serás mi Key – dijo Minho acurrucándose con Kibum porque sentía que el sueño empezaba a hacerse presente

-seré tu llave? – preguntaba sonriente Kibum ya que no le había disgustado nada aquel apodo

-ne serás mi Key! – contesto Minho con una sonrisa grande

-Key! – llamo Minho a Kibum

-dime.. – susurro Kibum

-puedo darte un beso? – pregunto  Minho asustado por que no quería que Kibum lo rechazara

-ne, te daré mi primer beso – respondió Kibum abriendo sus ojos y viendo a Minho

-también es el mío – susurro Minho acercándose a los labios de Kibum

Al sentir el roce de sus labios, fue como sentir el sol salir de nuevo, y literalmente el sol ya había salido, pero el calor y el roce suave de estos, era tan gratificante, lleno de amor, seguridad y ternura que se quedaron dormidos aún rozando sus labios.

 

………………..

 

Al despertar, un enojado padre de Minho lo esperaba ofuscado en su despacho, me puedes decir que paso? Porque el cuarto de tu madre esta un desastre? – preguntaba furioso el padre de Minho mientras el solo agachaba la cabeza intentado no provocar más enojo en su padre

-CONTESTA! – gritaba el hombre, Kibum se alerto del alboroto y temeroso pero decidido entro al despacho del padre de Minho

-lo siento, no le grite!, fue mi culpa, yo lo hice! – decía Kibum poniéndose de rodillas acto que jamás había echo

-Kibum por favor espera afuera!, esto es entre mi hijo y yo! – pedía el padre de Minho mientras Kibum negaba y repetía sus palabras

-no Kibum, no lo hagas es mi culpa padre, yo soy el responsable, dime qué debo hacer para remediarlo? – preguntaba Minho intentando levantar a Kibum

-tienes el desca… - el padre de Minho era interrumpido por la entrada del padre de Kibum que se sorprendió al ver a su hijo y la angustia en Minho tanteando un poco el ambiente.

-lo siento si mi hijo es responsable yo le daré un castigo, ya no le grites a Minho – pedía el padre de Kibum mientras este levantaba la vista hacia su padre

El padre de Kibum camino hasta al lado del padre de Minho y empezó a reprender a Kibum, y aunque Minho intentaba defenderlo, el padre de Kibum termino dictaminando.

-Kibum, estas castigado, no puedes salir de la mansión, una queja más y regresaras con tu abuela – dijo el padre de Kibum mientras les guiñaba un ojo a los niños dejándolos confundidos y aliviado al padre de Minho

Cuando los chicos salieron el padre de Minho miraba confundido al padre de Kibum, como tratando de analizar a su viejo amigo.

-crees que no me di cuenta que les guiñaste un ojo – hablaba el padre de Minho

-porque ellos no lo hicieron su historia no tiene ni pies ni cabeza, pero viste como intentaron defenderse entre sí? – pregunto el padre de Kibum mientras el padre de Minho asentía con una sonrisa de lado

-es genial que se hagan amigos, estaban todo el tiempo peleando y peleando, será genial que se hagan amigos, aparte yo también recuerdo que tú me metías en problemas constantemente – indicaba el padre de Kibum mientras el padre de Minho lanzaba una carcajada siendo derrotado antes los argumentos de su amigo

-sabes Kibum se parece más a ti que su madre! – comentaba el padre de Minho

-y Minho tiene mucho del carácter de su madre! – respondía sonriente el padre de Kibum

-lo sé, por eso no puedo castigarlo, y no pensaba hacerlo... solo quería que confesara – decía el padre de Minho

-pobre Minho! – susurraba el padre de Kibum mientras señalaba la carpeta en la que se encontraban trabajando

 

…………………

 

-que fue eso? – pregunto Minho

-no estoy seguro, pero creo que no estoy castigado – respondía Kibum en el jardín sentado al lado de Minho

-jajajajaja de cierta forma fue divertido – comentaba Minho mientras Kibum lo miraba retadoramente

-ok, ok no taaaan divertido – agrego Minho

-calla dibujo animado alienígena! – ordenaba Kibum mientras Minho rompía en carcajadas

Esa semana había sido realmente la mejor para ambos, ahora se llevaban bien y Minho y Key se cuidaban entre sí, de un momento a otro se habían vuelto tan inseparables, incluso a la hora de dormir, Minho llegaba al cuarto de Kibum alegando que no podía dormir y le pedía a Key que le contara alguna fantástica historia para dormir, mientras Key solo sonreía le hacia un espacio en su cama y comenzaba sus extraños cuentos tétricos de Disney de los cuales Minho disfrutaba aunque no entendiera ni la mitad de lo que se refería Kibum. Otra noche Kibum se acercaba a la habitación de Minho indicando que no podía dormir por la tormenta, durmiendo siempre abrazados.

-Key te tengo una sorpresa, te espero en el salón que tiene el piano – dijo Minho sin abrir la puerta de la habitación de Key que inmediatamente se levanto al oír la palabra sorpresa, nuevamente se ponía tan curioso como un gato.

Ese día sus padres habían salido a una reunión de emergencia aunque ya era tarde, indicaron que volverían seguramente al día siguiente, y debido a que el personal también estaba de vacaciones solo se encontraba la amable Sung Hye que los atendía y prepara la comida que les pidiera aquel travieso y dinamitante par.

-Minho cuál es mi sorpresa - dijo Kibum entrando al salón

-ta da! – en el momento que Minho apago las luces de la sala todo se ilumino como esa vez en el jardín haciendo brillar de emoción los ojos de Key

-apágalas de nuevo y te juro que estarás lleno de moretones – amenazaba Key mirando a Minho como un gato huraño

-anio, no lo pensaba hacer, me basto un golpe para no hacerlo de nuevo – decía Minho dramatizando el golpe que le había dado el golpe esa vez

-exagerado! – comentaba Key sonriendo

-mmm… Key!... toma – decía Minho entregándole una caja envuelta en papel de regalo a Kibum

-qué es? – preguntaba emocionado Key dando pequeños saltitos en su lugar

-ábrelo! Babo! – respondía Minho con obviedad

-yah! Quieres morir, babo! De verdad agradece que me diste un regalo – decía Kibum sacando la envoltura mientras Minho aguantaba las carcajadas

-omo!, es ese brazalete, pero como? – preguntaba Kibum mirando feliz a Minho

-Diva, estás hablando con Choi Minho, el hecho de que tu dejes en bancarrota a tu padre no implica que yo lo haga con el mío aunque pueda – contestaba Minho sonriendo

-yo no dejo en bancarrota a nadie! Son cosas que necesito! Aparte, de que sirve tener dinero si no puedes disfrutarlo? Eres tan niño! – comentaba Kibum mirando al cielo como pidiendo ayuda

-no soy tan niño, los niños no hacen esto! – contestaba Minho lanzándose a los labios de Kibum mientras Key se quedaba sorprendido y feliz en su lugar cerrando los ojos y entregándose a la caricia que le daba Minho

-pónmelo – dijo Key dándole el brazalete e Minho

-porque eres tan mandón? – contesto Minho tomando el brazalete y poniéndolo en la mano derecha de Key

-no lo sé así soy! – respondía el rubio

-bueno yo no tengo un regalo para ti pero puedo interpretar una melodía y cantarte una canción – proponía Key caminando hasta el piano

-Minho porque nadie lo usa? – preguntaba Key mientras se sentaba en el banquillo de aquel lujoso piano

-lo usaba mi madre, y nadie más sabe tocar el piano, a mi me gustaría aprender, pero mis amigos se burlarían si comentara algo así? – respondió Minho acercándose donde Kibum

-yo no me estoy burlando! – agregaba Key

-es porque tú eres más que mi amigo! – respondió seguro Minho sin entender del todo ese palpitar en su pecho haciendo sonrojar inconscientemente a Kibum

-yo te enseñare, soy excelente con cualquier instrumento! – decía Key mientras Minho lo miraba sorprendido

-aja, desde mañana tendremos lecciones de piano! – indicaba Key mientras empezaba a tocar una suave melodía que ha Minho le sonó como una nana

Minho estaba tan relajado escuchando la nana de Kibum y cuando cerró sus ojos un recuerdo de su madre vino a su mente, cantándole la misma nana mientras lo mecía y lo ponía en su cuna, una lagrima cayo por las orbes de Minho y escucho la aterciopelada voz de su Key cantarle, cuando termino de interpretar la canción Key observo los ojos llorosos de Minho y se preocupo.

-hey no la cante para que llores, aparte mi voz es hermosa! – se quejaba Key mientras Minho negaba suavemente

-eso me recordó a mi madre Key, gracias, es el mejor regalo del mundo! – contesto Minho abrazando a Kibum que sonreía feliz ante la declaración de Minho

-Cuando verificaron la hora era muy tarde aproximadamente media noche, se despidieron para irse a dormir, pero sus corazones y sus cuerpos no estaban tan tranquilos.

Key se encontraba dando vueltas y vueltas en la cama mientras Minho caminaba en círculos, tratando quitar los insanos pensamientos que en su mente habían aparecido luego de besar a Kibum antes de irse a dormir, porque ese beso no fue como los otros inocentes que se habían dado, no claro que no ese beso, fue fogoso, apasionante, un beso de adultos, lo había catalogado Minho sintió que tocaban su puerta  y se estremeció, que estaba pensando Minho?

-Si?? –preguntaba Minho sin abrir

-soy yo! Voy a pasar – respondía Key desde afuera abriendo su puerta ahí estaba porque siempre Key daba órdenes?

-ahhh es que, es que! Nooo – gritaba Minho abalanzándose en su puerta antes de que Kibum la abra del todo

-Minho deja de ser un babo y déjame entrar – forcejaba Kibum con Minho aun en la puerta

-Key, Key, no entres, por favor! – pedía Minho mientras Kibum empujaba más fuerte, la voluntad de Minho cedió y soltó la puerta haciendo volar a Kibum desde el umbral hasta el piso alfombrado de su habitación

-tonto debiste avisarme! – se quejo Kibum sobando sus rodillas

-lo siento! Key debes salir de aquí – susurraba Minho mientras Key lo miraba desde el suelo

-porque, shiro! Dormiré contigo, no puedo dormir en mi habitación – se quejaba Key mientras Minho negaba desesperado con su cabeza

-Min… Ho.. Porque… no? – tartamudeo Key al ver la imagen excitante de Minho con un problema en los pantalones de su pijama de avioncitos

-ohh! – jadeo inevitablemente

-mejor sal! – pidió Minho

-no quiero! – respondió Key poniéndose de pie y acercándose a Minho

-puedes volver a besarme? – pregunto Kibum mientras Minho solo cerro sus ojos y se abalanzo a sus labios, en un beso adulto, un beso tierno, apasionante, donde sus lenguas, buscaban mas contacto, Minho fue cerrando en un abrazo por la fina cintura Kibum

-Key creo que no podre detenerme – dijo entre el beso Minho

-no te detengas Minnie – respondió Key abrazando a Minho por el cuello

 

Lentamente se recostaron en la cama sin dejar de besarse, Minho acariciaba todo el suave cuerpo de Kibum mientras Key le devolvía las caricias, Minho no estaba muy seguro de que hacer, había visto sus videos eróticos pero no sabía qué hacer, Kibum, no era una chica, y no estaba muy seguro de que hacer así hubiera sido una chica. Sin embargo la intuición y el amor, le decía que no se preocupara mucho y solo se entregara al placer.

 

Las caricias eran más intimas, estaban sin ropa regalándose jadeos y caricias, Minho tomo el pequeño pene de Kibum entre sus manos y comenzó a darle caricias como a él le gustaba darse, al sentir los gemidos de Key al principio se asusto un poco pero al ver la cara de placer de Kibum aumento el ritmo, un tímido Kibum también sin querer quedarse atrás imito la acción de Minho y empezó a dar las mismas caricias que recibía en la hombría de Minho.

Los jadeos y el temblor de sus cuerpos era más notable, y sintieron una corriente  recorrerlos, aumentaron aún más el ritmo de sus manos y explotaron de placer.

-eso fue! Fue! Increíble – jadeaba Minho

-Minho… - susurraba Key regulando su respiración

-Key? – respondía Minho mirando hipnotizado el maravilloso cuerpo pequeño de Kibum

-necesito… más! – decía jadeando Key a lo que Minho solo atino a volver a besarlo y comenzar de nuevo con las caricias, Minho deseaba poder besar todo esa gloriosa piel de Key, y rompió el beso para empezar a bajar sus besos hacia su cuello, clavícula donde Key gemía aún más alto, cuando llego a una de las rosadas tetillas de Kibum paso su lengua y al sentir como el cuerpo de Key temblaba bajo el suyo una sonrisa se formo en sus labios y tomo con más ansias esos botones que lo llamaban a ser mordidos y saboreados, cuando termino de besarlos, siguió bajando por el cuerpo de Kibum repartiendo besos por todo su vientre hasta llegar a su objetivo el pene de Key, comenzó a darle lambidas como había visto que hacían esas chicas en los videos, y luego de un sonoro y grave gemido de Key se lo había metido por completo a su boca, comenzó con el vaivén volviendo a hinchar el miembro en su boca, sintió un liquido salir del pene de Kibum y con su mano empezó a buscar la de Kibum, encontrándose de inmediato. Dejo el pene de Key y siguió bajando sus besos por aquel lugar cuando sintió un gritito de Key.

-Ahí, ahí Min quema! – jadeaba Key y Minho comenzó a besar y meter su lengua en la parte rosada de Kibum

-no ya no! No puedo! – gemía de placer Key mientras Minho intuitivamente llevaba  su mano libre a ese lugar intentando estilarlo

-ah!... ahh… quema, Minho quema! – gemía Kibum y Minho empezó a meter a sus dedos encontrando el punto dulce de Kibum en el primer intento, haciéndolo arquearse de placer

-más… más… - chillaba Key

 

Minho empezó a meter un dedo más en la entrada de Key, pero para el rubio parecía no ser suficiente, y movía sus caderas buscando mas contacto, una idea vino a Minho si ponía su necesitado pene ahí podría ayudar a Kibum no? Y de paso ayudarse un poco.

Saco los dedos del interior de Key recibiendo gruñidos de protesta, y volvió a besarlo, masajeo su pene obteniendo algo de alivio y puso la punta en la rosada y virgen entrada de Kibum. Cuando Kibum sintió lo que pasaría solo tembló pero miro el amor de Minho en sus ojos y con una sonrisa y con su mano libre lo ayudo a entrar dentro de él.

Aquel lugar era más que increíble, tan caliente, infinitamente estrecho, tan placentero, Minho al sentir el placer llenarlo había olvidado a Key, regresándolo al momento viendo como lagrimas salían de sus hermosos gatunos ojos, beso cada una, y quiso salir de Key, sintiéndose culpable de hacerle daño a un ser tan hermoso que solo le había entregado amor.

-no solo espera, no.. – pero la fricción había sido tan placentera para ambos que se observaron a los ojos como hablando telepáticamente, Minho empezó a dar profundas pero lentas estocadas en Key que se deshacía en gemidos de placer.

 

Continuaron no sabían cuanto tiempo estaban así, Minho entrando y saliendo arrebatadamente mientras mantenían el agarre en sus manos, cuando Minho sintió nuevamente esa corriente invadirlo se vino dentro de Key que al sentir esa caliente esencia se vino entre sus cuerpos.

Nuevamente las miradas profundas que se regalaban mientras intentaban regular sus respiraciones, el tiempo estaba en ese momento sobrevalorado, y con sus miradas llenas de amor sonrieron plenos.

 

-Te amo Key! – dijo Minho

-Te amo Minho! – dijo Key sonriendo ampliamente a Minho

 

Y el sol salió, al percatarse de eso sonrieron y Minho salió de Key mientras este se quejaba con un gruñido, Minho tomo las sabanas y las mantas acurruco a Key en su pecho y se tapo.

 

-mmm… - se quejaba Key

-podemos repetirlo cuando quieras – prometía Minho besando a su gatito

-recuerda que solo eres de Kim Ki Bum – susurraba cerrando sus ojos Kibum sumiéndose en el sueño llegando a escuchar el suave susurro de Minho.

-tu recuerda que eres de Choi Minho – susurro Minho también cerrando sus ojos

 

…………………………………………………..

 

Viernes 28 de diciembre de 2012 – 02: 47 a.m.

 

Luego de la ardua jornada que habían tenido en la noche, un sonriente Key miraba por la ventana ese jardín que tanto amaba, mientras un alto y escultural chico lo abrazaba por detrás haciéndolo sonreír más ampliamente.

 

-lo recuerdas? – preguntaba la grave voz

-lo olvidaste? – respondía Key mientras hacia un puchero

-claro que no! Si gritaste como nena! – comentaba el chico que lo abrazaba ganándose un codazo por parte del rubio con mechones rosas.

-odiaba la oscuridad, mejor dicho la odio! – replicaba Key

-no te quejas cuando hacemos el amor – susurraba Minho en su oreja haciendo que Key le de otro codazo

-pervertido! Enserio! – decía Kibum soltándose del abrazo

-quieres hacerlo de nuevo! Enserio necesito más – alegaba el alto ganándose una mirada felina de su novio.

-ani! No lo hare, que me crees? – preguntaba molesto Key

-Key! – se quejaba Minho

- Choi Minho no soy una caja musical! – reprochaba el rubio

-pero quiero más, quiero más! – pedía el alto haciendo un puchero

-tú no has cambiado ni un poquito! – respondía Key con un puchero

-tu tampoco! – replicaba Minho

-te amo gatito Key de Choi! – decía Minho abrazándolo de nuevo haciendo reir a Key

-tan niño!... igual te amo! Minho de Kim! – decía Key mientras Minho comenzaba a reir abrazándolo mas hacia el.

 

……………………………………………………..

 

Cuando eran niños y ese maravilloso verano lleno de descubrimientos termino, aquellos niños que al principio se habían llevado tan mal se negaban a separarse, durante lo que quedo de ese semestre se comunicaban todo lo que podían, y antes de navidad Kibum y su abuela se habían mudado a Seúl con su padre. Desde ahí nunca más se separaron, siempre juntos, el mismo colegio, universidad, momentos felices tristes, siempre juntos.

 

Sus padres eran muy felices de ver la estrecha relación del par, al enterarse de la relación de ambos aunque estaban sorprendidos, no la repudiaron por que se daban cuenta que ambos no solo se complementaban si no que llenaron esos vacios que ellos no pudieron, y no supieron hacerlo. Luego de la boda en América, el padre de Minho había caído muy enfermo, así que Minho y Kibum habían regresado a esa mansión que había visto a su amor florecer.

 

Solo que ahora esa mansión seria testigo de un milagro de amor, y aunque lentamente la muerte se llevaba al padre de Minho, dentro del vientre de Key crecía un nuevo ser, y aunque ellos aún no lo sabían, pronto les llegaría la noticia que los volvería mas plenos aún.

 

Fin? – Para Minho y Key cada final siempre había implicado un nuevo comienzo, y este era su nuevo comienzo.